influyente de cosas raras.

soy influyente y predilecto de tres campos energéticos que nos hacen sentir vivos

amor (necesidad de dar todo por otra persona, te mantiene vivo)

muerte (el miedo de extinguirte, te mantiene vivo)

espejo (el contorno y la silueta concreta, el reflejo del alma, te mantiene vivo)

Es la triada que nos recuerda que estamos vivos, que marcamos un camino y dejamos huellas.

Estos tres amuletos son indispensables.

    Rondando por el mundo, hay infinidades de burdas teorías con mil seguidores por detrás que intentan imitar los pasos de estos tres talismanes, cuasi una mímesis.

Necesitaríamos una guía para viajar al interior, para reconocer nuestras luces y nuestras sombras, nuestra esencia y lo que se lo podría definir por destino.

Porque en realidad, no hay realidad, no existe lo definible ni lo temporal.

El mundo no entiende al ser humano, o mejor dicho el ser humano no entiende al mundo, y no tiene porque entenderlo.

Solo el amor, el espejo y la muerte pueden objetivar todo lo que nos pasa, porque nos pasa la vida, y como nos pasa la vida, estos tres nos recuerdan como si fuesen una alarma con el volumen a mil un lunes a la madrugada que si existimos, que si dejamos huella, que atravesamos este bloque terrenal, que somos, que soy. 

Espejo, muerte, amor

Muerte, amor, espejo 

Amor, espejo, muerte

y así, repetidamente hasta sentir la chispa de la vida (que no se define ni se teoriza).

Se siente. 

inspiración: el cuerpo un lugar utópico de foucault

(a mi abuela se le ocurrió el título y estoy fascinado)